Imperios,
guerras, desastres, plagas, dioses y héroes, todo esto y más ha tomado
parte en la historia del mundo ahora conocido como Kharn. Dos cortos
siglos han pasado desde la catastrófica caída de la Hegemonía de
Fleyshur, pero una vez más las ciudades y pueblos del mundo están unidos
por el comercio y la voluntad política.
Las grandes ciudades aspiran
a las glorias de antaño y los eruditos buscan la sabiduría de los días
antiguos. Desde que el poder de la Hegemonía fue roto por Sigmund de
Thirgard, el culto a Fleyshur ha perdido su anterior grandeza, y los
cultos de Baldar y otros dioses benignos han aumentado notablemente.
Pero
no todo está bien. En la espesura los orcos y goblins liberados por
Fleyshur han proliferado durante estos caóticos años. Las ciudades y
pueblos del mundo están seguras en este momento, pero las aldeas de todo
el territorio viven bajo una constante amenaza de devastación. Si los
merodeadores continuan esparciéndose sin oposición, pronto su número
puede amenazar a todas las ciudades a excepción de las mejor defendidas.
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